Imagen de la red
Dices que tienes corazón, y solo
lo dices porque sientes sus latidos;
eso no es corazón..., es una máquina
que al compás que se mueve hace ruido.
Gustavo Adolfo Bécquer
El reloj envejeció y se paró un día. Calló su monótono tictac, se quebró el cristal, enmohecieron sus manecillas. Las arañas tejieron resistentes telas aprisionándole en un abrazo letal, invitándole a no despertar, a morir para siempre.
Pero la maquinaria del tiempo, esa cosa abstracta siempre engrasada, siguió caminando hacia el futuro con su silenciosa canción. Segundo a segundo, minuto a minuto, hora tras hora...
Ana Sefern
Me he dado cuenta de que tienes comentarios abiertos... pues te comento
ResponderEliminarUn reloj se puede parar, se puede estropear
El tiempo real está muy bien engrasado, sí
Nunca se para y tampoco retrocede... siempre hacia delante contra vientos y mareas
Besos
Así es, por eso conviene vivir el momento, el minuto a minuto, el día a día, no desaprovechar el presente, no dejar para mañana lo que pueda ser hoy. Carpe diem.
EliminarBesos
¡Hola! Me ha gustado tu blog y ya tienes una nueva seguidora ;) Me quedo por aquí y espero que puedas pasarte por mi blog y quedarte.
ResponderEliminarNos leemos. Kisses ^^
Hola Sky, me pasaré seguro.
EliminarKisses
¡Hola! Acabo de descubrir tu blog y me quedo por aquí ^^
ResponderEliminarEspero que puedas pasarte por el mío (: Un beso (-:
Hola y bienvenida! Me pasaré.
EliminarUn beso